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jueves, 5 de abril de 2012

Aroma a Playa





Retomo este espacio, otrora dedicado a recetas y comida, con la idea de contar acerca de este corto pero sustancioso paseo que hicimos en familia a la península de Paraguaná, hace años, de soltera, ya había visitado la ciudad de Coro y por supuesto: los famosos Médanos con mi madre y mi hermano aprovechando una visita de mi abuela para llevarla a conocer otro paisaje Venezolano; en esa oportunidad nos quedamos ahí. nada se hablaba de
punto fijo y las de playas de la península no teníamos referencias.


Más tarde, mi primer viaje casada fue a Punto Fijo, ya en la península y sin
entrar en detalles diré que fue un viaje mas bien penoso y aburrido,luego en un par de ocasiones regresamos a Punto Fijo atraídos por la Zona Libre y las compras pero sin hacer nada de turismo; así pues, en esta oportunidad me propuse conocer la península , conseguí una posadita muy sencilla administrada por una amable cucuteña en las cercanías del pueblo El Hato, en la costa opuesta a Punto Fijo y alli nos quedamos por 3 noches que nos rindieron perfecto para conocer y pasear por toda la península.

Cabo San Román
El primer paseo obligado es concoer el Cabo San Román, en la puntita de Venezuela, el punto más al norte; alli estás mas cerca de Aruba que de otra ciudad de Venezuela, por ese mar que ves en la foto, llegó Alonso de Ojeda en 1499 a la península y comenzó la evangelización



En 1924 erigieron el faro que en la actualidad funciona con paneles solares; al subir puedes disfrutar de una hermosa vista de las costa caribeña, dicen que en la noche se ven las luces de las islas Curacao y Aruba; estar allí es emocionante, por el significado histórico y geográfico del lugar que a la vez permanece natural con el faro como única edificación y la cruz simbolizando el inicio de la evangelización.










Realmente disfrutamos esta visita, para llegar al faro hay una muy buena carretera desde el desvío de el Hato, pero llega un punto como a 5 km del faro que debes desviarte de la carretera y rodar por un camino de piedra, si los cauchos estan muy lisos, amortiguadores vencidos o el auto es muy bajito puede ser un riesgo llegar hasta alli, siempre es mejor en rústico o 4 x 4, pero aunque mi auto no lo es hasta alli nos llevó.
En el camino hay varias playa y estan las salinas, yo recomiendo salir temprano e ir primero al cabo, de regreso parar en las salinas (puedes caminar sobre un piso formado por los cristales de sal) y terminar el dia en cualquiera de las playa de la costa este (el supi, buchuaco, adícora......)


La costa Oeste

El segundo día, atravesamos la península, y eso nos llevo a ver de cerca el cerro Santa Ana, la parte más elevada de la península y la primera porción de tierra que avisó Alonso de Ojeda en su viaje, es realmente una montaña alta y verde que contrasta con lo plano y árido del paisaje.


Ese camino de casi una hora nos llevó a conocer una de las playas mas hermosas de Venezuela ( y conozco casi todas) en Los Taques, despues de la refinería de Amuay está Villa Marina, una ensenada pacífica con arena hecha de conchitas de mar erosionadas. En esta época del año hacía mucha brisa y el agua estaba bastante fría, pero aún así pasamos un día de playa pacífico y agradable, solo disfrutando la vista del mar azul fue recompensa suficiente.




En todas las playas que vimos, había servicio de toldos y restaurant, el carro lo estacionas casi al lado del lugar que te sientas, la gente que atiende en los locales nos trato con mucha amabilidad y fueron serviciales y agradables.

En Pueblo Nuevo descubrimos una encantadora dulcería al lado de la catedral, con exquisiteces como la torta de queso y el pie de limón, hermosamente ambientada en una casa colonial, y del otro lado de la plaza un carrito de perro caliente: TV`o comiendo.... que cenamos a reventar los 4 con solo 70 bs.

Definitivamente un paseo que vale la pena hacer, aunque el camino por recorrer sea laaaaaaargo.